Así lo afirma el profesor de EPE, carrera de Banca y Finanzas de la UPC, Jorge Luis Ojeda, quien nos brinda algunas sugerencias para que estos gastos no impacten negativamente en nuestras finanzas personales, utilizando simples herramientas de planificación financiera. Lo primero que debemos tener en claro es cuál es nuestro presupuesto de gasto, en otras palabras, con cuánto dinero excedente contamos para gastar en esta celebración.
Cuando hablamos de dinero excedente nos referimos al dinero que nos sobra luego de realizar nuestro gasto corriente, como el pago de colegios, pago de alquileres, pago de transporte, entre otros; o el dinero que podamos tener ahorrado.
Ojeda afirma que es importante en todo momento ser racionales y no engañarnos a nosotros mismos, pues toda diferencia entre el gasto proyectado y el presupuesto con el que contemos tendrá que ser cubierto con deuda. Por esta razón es importante tener el mayor detalle posible de los gastos y siempre sumar a estos un porcentaje al que llamamos imprevistos, dado que este cubrirá cualquier gasto que no hayamos considerado inicialmente, y que, por lo general, siempre ocurre.
Una vez realizado este análisis tendremos posiblemente un monto que debamos cubrir con deuda, lo que nos lleva a tomar decisiones de endeudamiento que debemos afrontar de la mejor forma.
Uno de los modos más utilizados de endeudamiento, por su practicidad, es utilizar una tarjeta de crédito, pero debemos tener muy en claro cuáles son sus beneficios y costos de utilización que le implicarán.