–“El objetivo principal de estas modificaciones es democratizar y extender más aún las posibilidades de inversión para que las personas puedan acceder a estos productos.
Para ello, la figura que se ha creado es la del distribuidor de fondos mutuos.
Tenemos actualmente a las sociedades de fondos mutuos, que usualmente suscriben convenios con entidades de su mismo grupo económico para efectos de vender estos instrumentos de inversión.
No obstante, tendremos también un mercado adicional de sociedades o personas expertas en gestión de fondos, pero que no cuentan con una red de distribución que permita la presencia de un mayor número de partícipes en el mercado general.
Se crea así la figura del distribuidor de fondos, entidad autorizada por la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) o por la Superintendencia del Mercado de Valores, las cuales distribuirán o venderán los fondos mutuos gestionados por otras sociedades.
–El colocador tenía que proporcionarle toda la información de los clientes a los que vendía a la sociedad administradora, pues esta era la responsable de la buena venta, del análisis del cliente para evitar el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo.
Esto causaba temor a los colocadores, ya que con esta información en manos de las administradoras, estas podían contactar con sus clientes y venderles directamente los fondos mutuos.
Ahora, el distribuidor es dueño de sus clientes, es el único que los conoce; recaen en él todas las responsabilidades indicadas. Lo único que revelará a la sociedad administradora es información agregada. Así, al ser los distribuidores dueños de sus carteras, tendrán más incentivos para ofrecer alternativas de fondos mutuos de diversas sociedades administradoras sin ningún temor.
–El mercado está concentrado en el sistema bancario. La idea es ampliar la oferta de fondos y la distribución de los mismos. Buscamos hacerlo a todos los segmentos de la población. Hay inversionistas con montos muy grandes y pequeños. Los grandes inversores tienen acceso a información financiera, a diferencia de los que tienen montos pequeños. Queremos ampliar la frontera de los fondos mutuos a las personas de a pie con excedentes pequeños para que aprovechen las ventajas.
–Las administradoras deberán compartir su comisión de administración o unificada con el distribuidor mediante un acuerdo entre ellos. El distribuidor no le puede cobrar un sol adicional al cliente final. La competencia será por calidad de servicios e información, y no por precios .
–Se crearon fondos mutuos para inversionistas institucionales, jugadores más grandes con montos mayores. Otro cambio es la cantidad de partícipes en los fondos. De acuerdo con la norma, esta cantidad era 50; ahora es flexible. Sucedía que sociedades administradoras, especialmente las pequeñas, creaban fondos pero no contaban
Al bajar ese número, se podrán aprovechar las ventanas de oportunidad de inversión. Esto va para los clientes corporativos y los individuales.
–Los fondos mutuos son la puerta de entrada al mercado de valores para la gente que tiene poca información o poco tiempo para hacer un seguimiento de sus inversiones, inclusive, para personas con pocos montos y sin posibilidad de diversificación de inversiones.
La ventaja es que los fondos mutuos brindan la alternativa de inversión para un determinado perfil de riesgo que quieran asumir los inversionistas. Estamos ampliando esta puerta para que las personas entren; con el tiempo, sus inversiones podrán ser más sofisticadas o directas en bolsa.
–Las modificaciones nos alinearán con los estándares de la Alianza del Pacífico, los cuales permitirán a las sociedades nacionales ser iguales o más competitivas que sus pares regionales.
Por ejemplo, el prospecto simplificado es un documento con información de ocho páginas. En otros países es de solo dos con información concreta para el partícipe, sin perjuicio que tenga el documento marco con la información ampliada.
Ese es el estándar mundial. Hemos reducido el requerimiento de capital y garantías a las sociedades administradoras de fondos mutuos para hacerlas más competitivas. Ahora, las administradoras peruanas son tan o más competitivas que sus similares de la Alianza.