3.7%
Crecerá la economía este año, impulsada principalmente por la evolución de la demanda interna, precisó la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
–La relación comercial entre el Perú y Francia es dinámica. Se trata de un mercado al que principalmente exportamos productos no tradicionales, de los cuales muchos se han posicionado como líderes en sus sectores.
Así, en el sector agro, vemos que la palta, el mango, los espárragos, las alcachofas, los arándanos y las granadas aumentaron su presencia de forma significativa y los encontramos en todos los puntos de venta a escala nacional.
La quinua ya es parte de la dieta del francés, inclusive en los menús de almuerzo es común ver ensaladas de quinua, langostinos y palta, tres productos que exporta el Perú.
Francia también es destino de nuestras conchas de abanico y textiles, tanto de algodón como de alpaca, fibra muy reconocida en este mercado.
–Desde el primer momento que se instaló la Oficina Comercial de Comercio Exterior de París, uno de nuestros principales objetivos fue relacionar a nuestras pequeñas y medianas empresas con importadores y distribuidores de los distintos sectores comerciales franceses.
Hemos realizado misiones comerciales como la del 2017 en la que llevamos torrefactores de café franceses (en misión conjunta con la Ocex Hamburgo), a las regiones San Martín, Amazonas y Cajamarca.
En esa ocasión, tuvimos la oportunidad de visitar al agricultor que cultiva el café especial de alta calidad. Como resultado de esta visita, varios contenedores se exportaron a Francia y Alemania.
–Francia posee un mercado para productos orgánicos de más de ocho billones de euros, con un crecimiento constante promedio de 15% al año.
El Perú es una fuente natural donde se puede cultivar frutas, hortalizas y cereales libres de pesticidas.
Por ello, venimos participando en ferias orgánicas y organizando encuentros entre productores e importadores para desarrollar este rubro.
La campaña Superfoods Perú fue lanzada en el momento adecuado para apoyar nuestras iniciativas de desarrollo para el comercio de productos orgánicos, lo cual llena de contenido e historia a nuestra oferta orgánica.
Como un ejemplo, la exportación de quinua a Francia se ha duplicado en estos últimos cuatro años y es importante comunicar a nuestros agricultores que la demanda de productos orgánicos en Francia y Europa seguirá creciendo porque el ciudadano es consciente de lo que come y cuida mucho su salud y el ambiente.
–El Perú exporta sobre todo productos físicos a Francia. Sin embargo, en conjunto con la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (Promperú), hemos comenzado a desarrollar algunos mercados de servicios como, por ejemplo, el de animación digital y el de franquicias gastronómicas.
Pienso que si desarrollamos una oferta exportable de servicios sostenida con presencia de empresas peruanas en las actividades que las Ocex organizan en Europa para servicios, podremos tener resultados exitosos en el corto plazo.
No olvidemos que si bien cada país europeo tiene sus propias características, el ser una unión económica con moneda común permite que una actividad realizada en Francia pueda tener repercusiones positivas en otros países del bloque, e incluso, fuera de él debido a que llegan compradores de diversas latitudes.
–Tomando como base nuestros destilados de uva, la Ocex París sostuvo reuniones con el alcalde de Cognac, Michel Gourinchas, para desarrollar un acuerdo de hermanamiento entre ambas ciudades que son los centros de las respectivas denominaciones de origen, pisco y cognac.
Asimismo, con el decidido apoyo de la directora de las Ocex del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Teresa Mera; de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), la Gobernación de Ica y el congresista Pedro Olaechea; y el alcalde de Pisco, Tomás Andía, se envió una carta a la ciudad de Cognac solicitando este hermanamiento.
El poner al pisco a la altura del más famoso destilado del mundo como es el coñac, permitirá reforzar la imagen de calidad de nuestro destilado de bandera, permitiendo además que se amplíen nuestros mercados de exportación y se enfatice el reconocimiento del Perú como el centro de origen del pisco.
Otro de los beneficios que un acuerdo de este tipo trae es un importante impulso al intercambio comercial, cultural, tecnológico, deportivo, entre otros.