6/11/2018
-No castigue. Eso podría generar rechazo a estudiar. Aplique el refuerzo positivo y premie los logros.
-Encuentre la raíz del problema. Dialogue e identifique si se debe a aprehensión, problemas emocionales e incluso el bullying.
-Destierre los mitos. Cualquier curso representa un reto, pero cualquier niño sano puede superarlo.
-Apoyo con la tecnología. Existen plataformas como la smartick para las matemáticas, que ayudan a cada niño a aprender a su ritmo.
-Converse con los profesores. Consulte por las oportunidades de mejora y las posibilidades para salvar los cursos en riesgo. Vea al maestro como un aliado.
-Determine un horario para repasar los cursos que causan problemas.
-Apunte a que el niño sea autónomo, pero supervise sus avances y felicite sus logros.
Fuente: Javier Arroyo, experto en educación de Smartick.