El Peruano
Segunda Etapa. Año 5. Edición Nº 296 Miércoles 23 de enero de 2019

5,600

millones de dólares fue el positivo impacto económico de la industria nacional ferias en el 2018, reportó la Asociación de Ferias del Perú (afep).
Marca Perú destacó en Dakar 2019
El ministro de Comercio Exterior y Turismo, Edgar Vásquez, destacó que el Dakar 2019 permitió al país posicionar la Marca Perú, mediante las transmisiones hechas por medios de comunicación de diversas partes del mundo. “La Marca Perú fue la gran protagonista en esta competencia, posicionándose no solo en las difusiones en directo, sino también con las repeticiones en canales de televisión, registros fotográficos y afiches”, sostuvo.

ENTREVISTA
PARA FINANCIAR EMPRENDIMIENTOS

El Perú necesita red de inversores privados

El profesor asociado de la Universidad de Barcelona en Emprendeduría, Jaume Argorich, comenta sobre los emprendimientos en nuestro país, los cuales requieren un punto de encuentro para conocerse y generar redes. Esa es la base de un ecosistema de emprendedores. Escribe: Rodolfo Ardiles Villamonte
¿En qué consisten los ecosistemas de emprendedores?

–Un ecosistema empresarial es la combinación de varios factores que permiten aprovechar de manera eficiente una oportunidad.

Históricamente, la emprendeduría siempre ha estado asociada al emprendedor, es decir, a la persona y a la oportunidad que toma y desarrolla. No obstante, ese empresario no es ajeno al entorno en el que se desenvuelve.

Lo que quiero decir es que la empresa, el empresario y la oportunidad que toma no aparecen de la nada, no existen en el vacío; hay otros agentes, como los inversionistas, universidades y gobiernos que también participan.

Todos ellos invierten a su manera, permitiendo que se den las relaciones de negocio y esto puede hacerse de manera favorable o desfavorable, permitiendo o frenando esas oportunidades.

¿Cuando habla de ese ecosistema emprendedor, ¿se refiere a una estructura fabricada a propósito o se trata de algo que va organizándose de manera espontánea?

–Para ser exacto, no es ni lo uno ni lo otro. Estamos hablando de una relación en la que no existe un agente central. Puede ser que haya posiciones que mejoren o amplíen esa red, o acciones que la reducen; pero no hay un poder central como un gobierno que diga qué es lo que se debe hacer y cómo es que se hará el emprendimiento.

Cuando se ha intentado hacer no ha funcionado. En Francia se dieron ejemplos dirigistas que terminaron en el fracaso. Lo que creo es que se podría hacer es un esfuerzo coordinado en ese ecosistema de emprendedores.

Aprendiendo de los fracasos
Argorich comenta que los fracasos y los momentos difíciles suelen ser el caldo de cultivo de emprendimientos. “Hay ecosistemas de emprendedores que están basados en grandes fracasos. Finlandia por ejemplo, se benefició con la caída de Nokia. Si esa empresa siguiera viva, hoy en día en aquel país no habría el número de startups que existe hoy. Según estudios recientes, en Finlandia hay unas 250 empresas formadas por extrabajadores de Nokia”, comenta. Otro caso que destaca es el de Nueva York, en donde muchos de esos negocios aparecieron luego de que IBM despidiera a parte de su personal. Las personas que salen de ese tipo de negocios tienen muchos conocimientos tecnológicos y los aplican en el desarrollo de nuevas empresas.
–¿Qué papel debe cumplir el Estado en ese ecosistema de emprendeduría?

–El Estado debe simplificar las cosas, haciendo más fácil los procesos, especialmente los referidos a cuestiones fiscales, pues suelen ser muy complejos.

Si hace aquello, le estaría haciendo un gran favor a los emprendedores, pues es muy diferente una empresa en la que hay 50 empleados o más que un negocio montado por un emprendedor en el que seguramente solo labora esa persona, la cual debe pasar mucho de su tiempo rellenando formularios.

Otra cosa que puede hacer el Estado es fomentar las conexiones entre los emprendedores. En vez de inyectar dinero, lo que debería hacer es tratar de establecer las relaciones entre las personas que pueden tener un negocio o una idea de negocio.

Lo importante es que la gente debe conocerse en ese ecosistema de emprendedores, en ese networking. Y así se puede tener información relevante, conocer por ejemplo cuánta gente existe en el Perú con patrimonio suficiente para invertir un 5% en ese startup y que actualmente no conoce a ningún emprendedor.

Creo que el Estado puede hacer mucho para fomentar esa relación.

ES CIERTO QUE LA DIGITALIZACIÓN PUEDE AYUDAR, PERO LOS SISTEMAS QUE SE CONFIGURAN SON EMINENTEMENTE GEOGRÁFICOS.

Cifras

0.37

es el índice de emprendimiento en el Perú, muy superior al promedio de la región (0.10).

3

es el puesto que ocupa el Perú en el mundo con mayor cantidad de emprendimientos en fase temprana.
–¿Cómo capturar ese otro patrimonio expresado en cuestiones inmateriales como el conocimiento o las ideas para desarrollar negocios?

–El principal problema con el que nos hemos topado es que no hay un mercado en el que se puedan conectar unas personas con otras.

Una iniciativa que puede funcionar para conseguirlo es crear una red de inversores privados. En el Perú ya hay algunas que funcionan bastante bien. Entonces, la idea es generar un punto de encuentro entre las ideas y el capital que puede financiar esas iniciativas.

–Usted mencionó el papel facilitador que debe cumplir el Estado, Estonia es un país que ha digitalizado sus procesos con ese fin, ¿qué otros países europeos han seguido su ejemplo?

–El caso de Estonia es más una excepción que la regla. Lo que ocurre en Europa es que se hacen esfuerzos que terminan anulándose entre ellos. Por ejemplo, hay ministerios que ven el tema fiscal y elaboran procedimientos muy complicados, pensando en las empresas ya establecidas para evitar el fraude. Todo ello está muy bien; sin embargo, creo que no piensan en los negocios de los emprendedores.

Otra cosa que se hace en Europa es darle dinero a los emprendedores, con lo cual se presenta la paradoja en la que se entregan recursos y al mismo tiempo se les obliga a reportar parte de ese dinero al Estado, lo que no tiene sentido. Por ello, digo que son esfuerzos que se anulan unos a otros.

–Aquí se habla mucho sobre el emprendedurismo, ¿qué hace que en un escenario tan complicado como el peruano existan emprendedores?

–Hay varios factores y uno de ellos, el cual muchas veces no se toma en cuenta, es que los emprendedores salen de las dificultades.

En España, por ejemplo, muchas de las iniciativas de este tipo han aparecido debido al paro (desempleo), que llegó al 20% en los últimos años.

En el Perú, como en otros lados, hay muchos problemas y, naturalmente, hay quienes se enfocan en ellos; y están las otras personas que tratan de encontrar soluciones.

Esa es la auténtica materia prima de los emprendedores, es una actitud que nace de las personas.