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El Peruano
LoNuestro
Miércoles 21d
ESPECIAL
Cualquier sacrificio corporal que haga el
viajero
para alcanzar las alturas de Cajatambo, termina perfectamente
compensado por la belleza del paisaje, en la cordillera de
Huayhuash, y por el colorido de las tradiciones locales.
SIERRADE LIMA
Cajatambo
L
eonardo Olave y Ray-
mundoHíjarsondosen-
tusiastasquesabendel
potencial turístico que tiene
su tierra. “Cajatambo esmuy
antiguo; fueparteimportante
del Imperioincaico”, comenta
Leonardo, mientras camina-
mos al noroeste de la ciudad.
“Todo ese caminoque ves
alláespartedelQhapaqÑan”,
agrega, luegoseñalaunasen-
daqueseencontraráconelho-
rizonte: el GranCamino Inca.
“En épocas imperiales,
nuestro terruño era conoci-
do como
Kasha tampu
(lugar
espinoso, una de sus toponi-
mias). Luego, Cajatambo ha
pasado por una serie de mu-
danzas limítrofes y fue parte
de cuatro departamentos,
hastaqueen1916fueanexado
ende initivaaLima”,con irma
Raymundo, con una sonrisa.
Avanzamos por el otrora
camino imperial, hasta lle-
gar a Tambomarca, legado
arqueológico que demues-
tra la importancia del lugar.
Los muros, levantados en
piedra, están cubiertos por
la hierba, la cual no ocul-
ta todo la evidencia de su
portento.
Avisan que la iesta del
Corpus Christi ha convoca-
doa ‘negritos’ y ‘huanquitos’,
dos de las tradiciones más
representativas del pueblo.
Llegamos en pleno jolgorio.
La plaza de armas y el atrio
de la iglesia principal, donde
descansa la patrona, Santa
María Magdalena, celebrada
En el pueblo de
Llocchi, pocos
kilómetros antes de
llegar a Cajatambo,
aproveche para probar
las manzanas, lúcumas,
peras, granadillas
y otras frutas que
ofrecen sus pobladores.
Los circuitos de
caminata en la
cordillera Huayhuash
son de los mejores del
mundo y compiten
con las travesías en el
Himalaya.
Cajatambo es el
Maravillosa cordillera
lugar más cercano a la
cordillera y se puede
llegar a la parte sur,
subiendo solo 40
minutos en auto hasta
el lugar llamado Cruz
Punta.
Uno de los
mejores miradores
cordilleranos del Perú
es el de San Antonio,
accesible tras una
caminata de tres días
desde la localidad de
Cajatambo. Desde ahí,
la vista de Huayhuash
es sencillamente
portentosa.
fiesta y encanto
(Viene de la página 1)