El Peruano
Año 4. Edición Nº 258. Jueves 7 de junio de 2018

DESTINOS
BELLEZA COSTERA

Caleta San José

Este destino es quizá el lugar más emblemático de la costa arequipeña. No solo porque es una de las más bellas caletas, sino porque también acoge una iniciativa ecoturística que lo convertirá en amante confeso de estas playas. Texto y fotos: Walter H. Wust www.conservamos.org
Muchas veces me he preguntado cuál es la playa más hermosa del Perú. Después de repasar en mi mente las imágenes de lugares alejados y dotados de una naturaleza viva y elocuente, termino volviendo a esta remota y espectacular porción de mar y tierra.
El islote Hornillos es el hogar de colonias de lobos marinos, pingüinos y aves guaneras.

El bote acodera en un muelle de roca poblada por erizos y percebes. Una casa de madera asoma entre los acantilados de roca y las dunas blanquísimas de arena volcánica. Es el pequeño albergue que han montado Mauricio Mendoza, Gonzalo Llerena y sus socios, como complemento a su proyecto de crianza de conchas de abanico con el nombre de Inca Scallops.

Sabores de la travesía
  • La única manera de acceder a esta y otras playas de la zona es por vía marítima. Las lanchas parten de la caleta de Quilca y van por cuenta del hotel.
  • Otra posibilidad es partir, también por vía marítima, desde el puerto de Matarani. Ambas rutas tardan 1.30 horas.
  • Uno de los puntos fuertes de caleta San José es su oferta gastronómica. Del pescado y mariscos no se preocupe, el mar los pone. Imagínese un arroz con conchas que usted ha cosechado; erizos, choros o lapas; lenguados, chitas o cabrillas recién sacados del mar.
  • Manos expertas los convierten en cebiches, jaleas, parrillas y parihuelas que lo dejarán enamorado de esta porción de nuestra costa.
Ecoturismo

Mientras engordan las conchas en el mar repleto de plancton, estos amigos han puesto en marcha un proyecto ecoturístico que se ha convertido en ejemplo de conservación y uso sostenible. Mauricio se encarga de la logística y Gonzalo, un buzo reconocido en el Perú, provee del pescado y los mariscos para los visitantes. Su equipo incluye a un cocinero de primera y algunos ayudantes.

Todos sin excepción hacen gala de ese aire de tranquilidad que se hace difícil de comprender para los que vivimos en la ciudad. Aquí los horarios los ponen el sol, las mareas y el hambre. La palabra estrés se arrancó del diccionario hace tiempo.

Esta parte de la costa de Arequipa está adornada con un rosario de playas y caletas dignas de calendario: Huacchiray, Arantas, Chicanera, la Sorda, la Francesa, Ancupita, la Huata, Honoratos… La cereza del pastel es el islote Hornillos, un promontorio rocoso convertido en el hogar de grandes colonias de lobos marinos, pingüinos y aves guaneras. Los recorridos en lancha por esta zona son realmente extraordinarios.

Un nuevo grupo de búngalos, agua extraída del subsuelo con la ayuda de un molino de viento y luz eléctrica de generador complementan la infraestructura necesaria para alojar a una veintena de visitantes ansiosos de explorar esta costa de ensueño o tumbarse a disfrutar de la paz del lugar. Cae la tarde, disfrutaremos de una cerveza junto a la fogata. Los kayaks relucen en la orilla, aguardando la jornada del día siguiente. En realidad, muchas otras cosas y emociones nos aguardan, y a usted, si se anima a venir.