El Peruano

Segunda Etapa. Año 4. Edición Nº 256 Lunes 19 de marzo de 2018

INFORME

INDEPENDENCIA DESARROLLA INICIATIVA

Forestación para proteger y ordenar

Lima es una ciudad vulnerable ante la presencia de desatres naturales, debido a su ubicación geográfica y el crecimiento desordenado de muchos de sus distritos. Independencia plantea mejorar esta situación con la forestación de las laderas de sus cerros.

Escribe Víctor Lozano Alfaro

El cambio climático ha mostrado sus devastadores efectos en todo el mundo y, especialmente, en el Perú. Sectores productivos seriamente afectados, así como viviendas, carreteras y vías de comunicación destruidas, han sido el saldo de la presencia de fenómenos naturales en el país.
Ante esta coyuntura, el Gobierno nacional, los gobiernos regionales y los municipios emprendieron diversas acciones de reconstrucción y prevención. En este último caso, los gobiernos locales han tenido iniciativas más que interesantes.
Este es el caso de la municipalidad distrital de Independencia, que ha puesto en marcha el programa Forestación de Laderas, con el objetivo de reducir el riesgo de desastres, formalizar la propiedad y mitigar los efectos del cambio climático.
“En nuestro distrito, las laderas de los cerros se van poblando de manera ascendente. Las personas que se instalan en esas zonas no toman en cuenta los riesgos a los que se exponen”, afirmó el alcalde Evans Sifuentes.
Si bien es cierto que el programa de forestación es una medida preventiva ante la posibilidad de presentarse algún efecto climático, también constituye una especie de barrera contra la informalidad, pues evita que las personas invadan zonas inhabitales o intangibles.
“Se trata de un instrumento para frenar el uso indebido de las áreas públicas. De esta forma, evitamos que las laderas continúen siendo invadidas y que aumente el riesgo de desastres naturales en el distrito”, comentó Sifuentes.
Cabe precisar que aproximadamente un millón de personas en Lima Metropolitana viven en las laderas de los cerros, en viviendas construidas sin asesoramiento técnico, con materiales inadecuados y que, de acuerdo con las instituciones técnico-científicas del país, resultan vulnerables y de alto riesgo ante la probable ocurrencia de fenómenos naturales.

EL PARQUE BOCA DE SAPO ES UNA PROPUESTA PARA EL DESARROLLO TERRITORIAL Y CONTROLA LA EXPANSIÓN POBLACIONAL DESORDENADA

El programa
     El programa de forestación se inició en el 2015, con el desarrollo del parque forestal ecoturístico denominado Boca de Sapo. Allí se plantaron 1,000 plantones de las especies de huarango, huaranhuay, molle andino, palo verde, mimosa y tara.
“A estas plantas se les ha aplicado retenedores de agua hidrogel y riego por goteo con agua residual tratada”, explicó Sifuentes.
Este primer lote de plantones forma parte de los 3,000 que serán sembrados en las 14 hectáreas de laderas de cerros que comprende este parque.
“Nuestro objetivo es sembrar 7,000 plantas, así como implementar miradores y espacios de recreación familiar y atractivos turísticos”, afirmó el burgomaestre.
El proyecto de forestación cuenta con el apoyo del Centro de Estudios y Prevención de Desastres (Predes) y con el financiamiento de la Agencia de los Estados Unidos para Internacional (USAID), por intermedio del programa Reducción del riesgo en áreas vulnerables del distrito de Independencia.

Impacto social
     La siembra de estos árboles en esta zona no solamente implicará una especie de barrera contra los desbordes o desplazamientos de tierra que puedan producirse, sino que además significará interesantes ingresos para la comuna, debido a que se trata de plantas cuyos frutos pueden comercializarse.
“La idea es que el parque sea autosostenible, es decir, con el tiempo debe generar sus ingresos. Esa es la segunda etapa del proyecto”, aseveró Sifuentes.
A raíz de esta iniciativa, el municipio identificó en sus laderas de cerros 29 zonas potenciales de forestación, con una extensión total de 50 hectáreas, en donde se podrán sembrar 50,000 árboles nativos y construir siete nuevos parques forestales.
“Hoy tenemos la convcción de que este modelo funciona. Ha sido probado y los resultados son importantes. Ahora que sabemos cómo hacerlo, queda reproducirlo y para eso estamos trabajando las entidades involucradas y esperamos que se sumen otros distritos, para así formar una cadena que no solamente nos permita afrontar los riesgos de desastres naturales, sino también luchar contra la informalidad”, puntualizó la autoridad municipal.