El Peruano
Segunda Etapa. Año 5. Edición Nº 276 Miércoles 8 de agosto de 2018

56.4%

DE LAS EXPORTADORAS PERUANAS SON MICROEMPRESAS; MIENTRAS QUE EL 25.6% SON PEQUEÑAS Y EL 18% MEDIANAS EMPRESAS, INFORMÓ COMEX PERÚ.
Ampliación de Shougang Hierro Perú
La minera Shougang Hierro Perú inauguró la ampliación de sus operaciones en Marcona (Ica), lo que permitirá incrementar la producción nacional de hierro, que de enero a junio creció 9.8%, reportó el Ministerio de Energía y Minas (MEM). Con esta ampliación, Shougang proyecta duplicar su producción, pasando de 10 millones a 20 millones de toneladas de concentrados de hierro por año. El titular del MEM, Francisco Ísmodes, estuvo en la ceremonia de inauguración del complejo metalúrgico.

ENTREVISTA
ES TIEMPO DE APLICARLAS

El Perú y las reformas de segunda generación

El presidente de la Asociación de Exportadores (Adex), Juan Varilias, analiza el mensaje a la Nación brindado por el presidente de la República, Martín Vizcarra. Sostiene que es el momento de impulsar las reformas pendientes y felicitó el impulso a las exportaciones que viene dando la actual administración. Escribe: Rodolfo Ardiles Vilamonte
¿La cifra de 4% como porcentaje de crecimiento para el Perú anunciada por el presidente Vizcarra, está dentro de lo posible para un país como el nuestro?

–“El comportamiento de la economía peruana en el primer semestre revela una recuperación que hace viable llegar a la cifra planteada por el presidente Vizcarra. De todos modos, en un escenario de alta incertidumbre, las proyecciones deben tomarse con precaución. Felizmente, el crecimiento se debe en parte a la decisión política de impulsar las inversiones y a las exportaciones; lo cual genera más confianza en el futuro. Crecer 4% es una buena noticia con relación al bajo crecimiento de los últimos cuatro años; pero no es insuficiente frente a objetivos como la reducción del desempleo y de la informalidad o de mejoras en los servicios públicos.

¿Cuál es su apreciación sobre el mensaje presidencial en los aspectos que tocan a la vida económica del país?

–“La vida económica está íntimamente ligada al desempeño institucional. Por más de una década crecimos independientes del contexto político; pero ahora que el Perú necesita reformas de segunda generación para recuperar competitividad y crecimiento, la situación política tiene un peso mayor sobre la economía. Las reformas económicas requieren de decisiones políticas, de consensos, de arreglos institucionales. Nada de eso es posible en un clima tan distorsionado como el actual. Por ello, se deben hacer las reformas institucionales para pensar luego en una mejora económica sustancial.

–Viendo más allá de los productos tradicionales y del repunte del cobre, ¿qué influencia tendrán las exportaciones en el crecimiento del 4% que se espera lograr este año?

–Todavía dependemos de los minerales; por escala, un solo proyecto minero puede tener un impacto de hasta un punto porcentual en el crecimiento económico; pero ese tipo de crecimiento tiene poco efecto en el desempleo, la informalidad y la pobreza.

Se requiere un tejido productivo más diversificado e integrado, generador de valor agregado y empleo mejor remunerado. Estos últimos objetivos se logran con las exportaciones no tradicionales.

Felizmente, este sector se ha recuperado y esperamos que se sostenga para que alcance una escala mayor y así se genere otro tipo de crecimiento económico.

Cifras

15.1%

crecieron las exportaciones no tradicionales en mayo último, reportó el Banco Central de Reserva.

45,000

millones de dólares fue el intercambio comercial del Perú con el mundo en el primer semestre.
–¿La guerra comercial que libran los grandes bloques económicos, especialmente China y Estados Unidos, tendrá algún impacto sobre el Perú?

–En India dicen que cuando dos elefantes pelean, el que pierde es el pasto. Ese es el riesgo que genera esta guerra entre las dos primeras economías del mundo.

Sin embargo, el tiempo es importante en este análisis. En el presente, el principal temor es la probable caída del precio de los minerales, en especial del cobre; pero en el mediano y largo plazo hay muchos escenarios posibles.

Uno de ellos es que la guerra cese y veamos una solución negociada. El otro es que la guerra se profundice. Lo ideal es que sepamos movernos en ambos escenarios. La estrategia de integración que hemos seguido nos ayuda a tener más recursos para enfrentar estos escenarios.

–¿Qué puntos sugiere deben ser considerados en la agenda exportadora del Gobierno hasta el 2021?

–La mejora de la competitividad es una agenda fundamental y amplia. Infraestructura, educación, tecnología e institucionalidad están incluidas en ella y son vitales para tener una nueva estrategia exportadora.

Requerimos políticas de desarrollo sectoriales para atender problemas específicos. Una política de desarrollo agrario y otra de desarrollo industrial son vitales.

Asimismo, necesitamos una estrategia de promoción de inversiones y exportaciones más proactiva y agresiva.

EL PRESIDENTE VIZCARRA DEMOSTRÓ FIRMEZA AL INCLUIR A LA POBLACIÓN EN LAS REFORMAS MEDIANTE UN REFERÉNDUM.
–En cuanto a la capacidad productiva-exportadora de las regiones, ¿qué peso tiene en el PBI local?

–Evidentemente, hay un desarrollo heterogéneo a escala regional. Sin embargo, cada región tiene una cartera de productos exportables; por lo tanto, tienen posibilidades de desarrollo.

Las zonas económicas especiales son una herramienta. Estos espacios diseñados para fortalecer la competitividad de los productos exportables pueden adecuarse en cada región para desarrollar actividades propias de cada una de ellas.

–En cuanto a los mercados regionales, ¿cómo evalúa la apertura de los mercados latinoamericanos (proteccionismo), ahora que se han dado cambios de mando en países como Ecuador y Argentina?

–El libre comercio no se detendrá. Ecuador y Argentina son ejemplo de ello. La convergencia entre la Alianza del Pacífico y el Mercosur alimenta esa idea.

América Latina es la región menos integrada del mundo; el comercio entre nosotros es bajo; asimismo, tenemos poca presencia en las cadenas regionales de valor. Hay muchas cosas por hacer si apostamos por una integración profunda. ●