MINERÍA Y DESARROLLO: Binomio social

Ubicada entre la luz y la sombra de nuestra historia, la minería se mantiene como un factor decisivo para el desarrollo del Perú, pero al mismo tiempo es una fuente de conflictividad social. Escribe: Rodolfo Ardiles V.

Analizar la minería en el Perú es como observar a un paciente bipolar, tiene el potencial de ser el gran motor del desarrollo nacional, pero también es una fuente de conflictividad social.

Según datos del Consorcio de Investigación Económico y Social (CIES), aunque la actividad minera no está presente en todo el Perú y el 90% de sus recursos se concentran solo en 10 regiones; las transferencias de fondos mineros a gobiernos regionales entre 2011 y 2016 llegan a los 24,470 millones de soles.

Pese a ello, los conflictos sociales también han ido en aumento. Según el Boletín de Actualidad Minera del Perú de la ONG CooperAcción, sobre la base de los datos divulgados por la Defensoría del Pueblo, entre diciembre del 2017 y mayo del 2018 los conflictos sociales de diferente tipo han pasado de 168 a 198. Los de origen socioambiental tienen un mayor porcentaje (64.6%), de los cuales el 65.6% son casos vinculados a la minería

En los últimos meses la inversión minera también ha incrementado su volumen. Según el Ministerio de Energía y Minas (MEM), en el acumulado de enero a noviembre del 2018, la inversión generada por esta actividad económica ascendió a 4,181 millones de dólares, lo que representa un aumento de 25.4% respecto a similar período del 2017.

En agosto pasado, las inversiones mineras sumaron 395 millones de dólares, registrando un aumento de 6.3% respecto al mismo mes de año anterior (372 millones), según la declaración estadística mensual proporcionada por las empresas mineras que operan en el Perú.

Datos

En el Perú, solo el 14% de la población posee una tarjeta de débito y solo el 10% accede a una tarjeta de crédito, lo cual limita el desarrollo del comercio digital.
Un ejemplo del desarrollo de la innovación digital son los Cyberdays o campañas de ventas con descuentos por Internet. En Chile participan 284 empresas mientras que en el Perú son casi 40.
Desde el 2010, los trabajos relacionados al sector tecnologías de la información (TI) vienen creciendo dos veces más que el resto, tendencia que se mantendrá hasta el 2020.

Eficiencia del gasto

El investigador de la Escuela de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico (UP) Omar Narrea asegura que el gran problema no radica en la existencia de recursos, sino específicamente en la eficiencia del gasto.

LOS RECURSOS MINEROS TRANSFERIDOS ENTRE 2011 Y 2016 A LOS GOBIERNOS REGIONALES EQUIVALEN A TRES VECES EL PRESUPUESTO DE INFRAESTRUCTURA DE TRANSPORTES DEL 2017.

Explica que en las 10 regiones que concentran el canon minero hay 49 universidades, pero solo 15 de ellas recogen el 74% de los recursos aportados por la minería a este rubro entre 2015 y 2017, alrededor de 1,759 millones de soles.

“La Universidad San Agustín de Arequipa (UNSA) recibirá 70 millones de soles por concepto de canon del 2018. Si lo vemos desde el punto de vista de los recursos, hay regiones que tienen sus motores encendidos y otras no tanto. Lo que hay es ineficiencia del gasto”, asevera Narrea.

Objetivos

Al igual que otros expertos, Narrea cree que la minería puede desempeñar un papel especial en el desarrollo del país si se la conjuga inteligentemente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), porque se trata de un rubro capaz de catalizar buenas políticas públicas que hagan más fuerte la productividad y el desarrollo económico.

Escenario 2019

Si bien el año pasado fue relativamente tranquilo en materia de conflictos sociales, para la ONG CooperAcción se pueden presentar algunos problemas si se insiste en proyectos que mantienen resistencias, como el de Southern Perú. La empresa anunció que espera el otorgamiento de la licencia de construcción para iniciar el desarrollo de Tía María, proyectado para este año, pese a que hay gran resistencia en el valle del Tambo. Otro tema que preocupa a la ONG es la demanda de apoyo a las autoridades peruanas hecho por el gobierno chino y la empresa Zijing, para sacar adelante el proyecto Río Blanco, ubicado en las provincias piuranas de Huancabamba y Ayabaca.

Contra el reloj

La presidenta del Centro Ideas y Coordinadora del Grupo de Diálogo, Minería y Desarrollo Sostenible, Marina Irigoyen, sostiene que la minería podría potenciar su aporte al desarrollo cumpliendo los ODS 13 (cambio climático); 14 (contaminación minera); 15 (gestión sostenible de bosques) y 17 (alianzas multiactor para el desarrollo sostenible). “Uno de nuestros objetivos tiene que ver con el cambio climático que afecta, entre 1993 y 2015, unas 180,000 hectáreas agrícolas. También tenemos efectos de la sequía y déficit hídrico en las cuencas mineras. Además, la existencia de residuos sólidos contaminantes sin procesar también contribuyen al cambio climático”, dice Irigoyen.

El investigador se refiere a los ODS 8 (trabajo decente y crecimiento económico); 9 (industria innovación e infraestructura); 12 (producción y consumo responsables) y 17 (alianzas para lograr los objetivos trazados).

Cifras

9.8%

Del producto bruto interno (PBI) nacional, proviene de la minería, de acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas.

Para conseguir esas metas, manifiesta, primero debe identificarse el ámbito de intervención a nivel de clúster minero o corredor económico priorizado.

“En el Perú se han identificado cuatro clústeres mineros. Uno está en el norte (Áncash, Cajamarca y La Libertad), que agrupa a 39 empresas mineras y 18,551 trabajadores; el otro se ubica en el centro (Junín, Lima y Pasco), con 146 empresas y 38,035 trabajadores, el tercer clúster está en el sur (Arequipa, Moquegua, Tacna y Madre de Dios) con 124 empresas y 14,043 trabajadores. Finalmente, tenemos el clúster auxiliar minero de Lima y Arequipa, con 108 empresas y 54,247 trabajadores”, dice Narrea.

EL PERÚ SE UBICA EN EL PUESTO 64 (DE 193), CON 68.4 PUNTOS DE 100 EN EL RÁNKING DE CUMPLIMIENTO DE LOS ODS 2018.

Agrega que, entre los corredores económicos más importantes, la cadena minera Apurímac, Cusco, Arequipa y Moquegua abarca 60,000 trabajadores y su facturación por ventas cercanas asciende a 10,000 millones de soles.

Otro aspecto que menciona el investigado es el referido a la identificación de los recursos públicos y privados.

Para ello, hay diferentes fuentes y formas de financiamiento. Por ejemplo, para el tema de pasivos ambientales está el Fondo de Contingencia para Remediación Ambiental, como parte del Fondo Nacional del Ambiente cuyo presupuesto suma 50 millones de soles.