El Peruano
Segunda Etapa. Año 5. Edición Nº 299 Miércoles 13 de febrero de 2019
ECONÓMIKA
NO PERMITA QUE SU SUEÑO ACABE ABRÚPTAMENTE

Desorganización enemigo del emprendedor

Ordenar y gestionar no son condiciones exclusivas de las grandes empresas. Todos los emprendimientos deben optar por ellos para crecer y desarrollarse.
Cuando emprendemos un negocio lo hacemos con mucho entusiasmo, cuidando cada detalle y siempre estamos atentos a cada acontecimiento y necesidad que pueda surgir y que incida en el futuro de nuestro emprendimiento.
Sobrevivencia
El Perú es considerado uno de los países con la mayor tasa de emprendimiento del mundo. De hecho, ocupa el cuarto lugar en capacidad emprendedora. No obstante, ocho de cada 10 peruanos fracasan antes de que sus emprendimientos lleguen a los cinco años de vida, además de ser considerado como uno de los países con el menor nivel de innovación empresarial. Por tal motivo, es importante que el emprendendor no solamente centre sus esfuerzos en vender y ganar dinero. Es necesario que establezca estrategias que lo fortalezcan como empresario. “Solo así podrá ser definido como un auténtico emprendedor”, dijo Lastra.

Sin embargo, con el transcurrir del tiempo, solemos descuidar ciertos aspectos considerados pequeños, pero que a la larga pueden llevarnos a una desorganización que, en muchos casos, resulta fatal para la continuidad de nuestro proyecto.

“Cuando constituimos una empresa o negocio en realidad estamos armando una estructura que debe entregar determinados productos, como bienes y servicios para satisfacer las necesidades de un segmento de mercado específico; pero que también debe hacernos ganar dinero y brindarnos satisfacciones empresariales”, afirmó el presidente del Instituto Latinoamericano de Desarrollo Empresarial (Ilade), Eduardo Lastra.

Por ello, para cumplir con dicho propósito, la empresa o negocio, es decir, la organización empresarial, debe realizar determinadas actividades.

“Este trabajo es el que se identificará como operaciones, tareas, funciones y áreas, que en su conjunto conforman la estructura corporativa”, sostuvo el especialista.

Gerencias

Precisamente por lo anterior, en la empresa o negocio se establecerán áreas funcionales básicas denominadas gerencia.

“Estas gerencias implican Administración, Producción, Ventas, entre otras. Cada una de ellas realizará el trabajo necesario que permita lograr los objetivos que le competen como unidad operativa”, comentó Lastra.

No obstante, agregó, no se trata solamente de que cada quien haga sus tareas por su cuenta y riesgo. “Las coordinaciones entre los puestos y las áreas son fundamentales para mantener una buena organización”, refirió.

A entender del presidente del Ilade, se suele aceptar que la coordinación es clave, especialmente en las medianas y grandes empresas y no tanto en las micro o pequeñas.

“Me permito sostener que en las mype también es importante la coordinación”, sostuvo.

ES IMPORTANTE DEDICAR TIEMPO A LAS REUNIONES DE COORDINACIÓN DEL TRABAJO, LAS QUE DEBEN SER PROGRAMADAS Y EJECUTADAS ADECUADAMENTE.
Orden

Otro elemento fundamental de la organización es el orden. De acuerdo con Lastra, la expresión puede ayudar a conseguirlo en el quehacer empresarial: “hazle un lugar a cada cosa y mantén esa cosa en su lugar”.

Si su negocio es muy pequeño, los documentos, por ejemplo, pueden manejarse utilizando los tradicionales archivadores de palanca bien identificados: Ventas, Compras, Inventarios, Cuentas por Cobrar, Caja y Bancos, Cuentas por Pagar, entre otros.

“A medida que aumenta el tamaño de la organización empresarial, se podrá utilizar herramientas de gestión más complejas, acorde con las necesidades de la empresa”, puntualizó.