El Peruano
Año 4. Edición Nº 255. Miércoles 16 de mayo de 2018

ESPECIAL
MILENARIO Y MÁGICO
CUSCO
ES FIESTA
Más de 200 actividades programadas entre mayo y junio: música y cantos de la cultura viva. Desfiles de danzas típicas. Santos y vírgenes en las calles. Ferias artesanales y gastronómicas. Tributo a la tierra. Cusco se muestra, el Inti Raymi coronará las celebraciones de su mes jubilar. Cusco los espera. Texto y Fotos: Rolly Valdivia
No sonríe, ni un poquito sonríe por más que se lo piden varias voces. ‘Para nuestro selfi, por favor’… y nada, no hace caso. Se mantiene serio, impertérrito, monumental. Total, él no acepta órdenes, a lo mucho sugerencias de unos cuantos elegidos. Lo suyo es dirigir, planificar, ser obedecido, tal cual el designio de su padre y de su dios. Siempre fue así. Acaso no lo saben los que lo atolondran con los flashes de sus cámaras. No se dan cuenta de que está siendo demasiado concesivo y que hoy se está mostrando en extremo generoso al permitir que ellos se acerquen y lo acorralen.

Quizá sea el momento de que un sinchi los encare y los ponga en su sitio. Habrase visto semejante alboroto. En qué libro o tratado de historia se ha escrito que los runas –el pueblo– le pidieran caritas amables al sapa inca para que no quepa duda de su rango y poder. Ah, es cierto, los tiempos han cambiado y mucho en las cuatro regiones del Tawantinsuyu.

En la plaza San Francisco se congregan los creyentes a disfrutar de un chiriuchu, el emblemático potaje inca.

Por eso, sin sonrisas, el soberano abandonó el Cusco y partió para Lima. No salió en litera ni su séquito enrumbó por la magnífica red caminera que trazaron sus ancestros. En avión habrá venido y es muy probable que durante el vuelo le revelara a su Taita Inti las actividades que se realizarán en su honor en las calles y plazas del que fuera el ombligo de su mundo.

Un adelanto de lo que se anunció en Lima, con una puesta en escena en la huaca Pucllana. La representación fue algo así como un calentamiento para el inca, la qoya (esposa), el willaqhumo (sumo sacerdote y consejero del inca), y el ninapirikuq (sacerdote del fuego sagrado), varios de los protagonistas del Inti Raymi, el evento principal de mes jubilar.

Esa es la actividad principal entre todas las actividades tradicionales y evocadoras del pasado que se realizan en una región efervescente en la que, a decir de su alcalde provincial, Carlos Moscoso Perea, las fiestas no paran, las hay todo el año. Solo hay que “agudizar el oído y en alguna parte una trompeta nos da la nota, un cohetillo confirma la ubicación y un ‘hola hermano’ nos integra. Allá vamos”.

El alcalde no miente. Cuántas veces el viajero es sorprendido por un pasacalle o una procesión, entonces, cambia sus planes, se olvida de las excursiones, se deja llevar por la música y los cantos de la cultura viva, por el festivo palpitar de las costumbres. Experiencia distinta, que se intensifica en las últimas semanas de mayo y se prolonga chispeante durante junio.

“Más de 200 actividades, incluyendo el tributo a la tierra en la plaza Mayor y el desfile de danzas típicas de las 12 provincias de la región”, revela Geovanni Madrid Escobar, vicepresidente del Directorio de la Empresa Municipal de Festejos del Cusco (Emufec), la entidad encargada de organizar el programa celebratorio.

Al escucharlo se agigantan las ganas de retornar a la urbe mítica fundada por Manco Cápac y Mama Ocllo. Se activan los recuerdos. Crece la añoranza por los pasos que diste, por los pasos que darás en ese “centro de pensamientos y voluntades donde nació la identidad del Perú”, como define a su terruño el ministro de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Roger Valencia.

Programar un viaje en los días de celebración, fe y jolgorio. Fecha tentativa: 30 y 31 de mayo. Corpus Christi. Las imágenes religiosas salen de sus templos. Procesiones. Santos y vírgenes en las calles. Andas que avanzan despacio, que se detienen para ser homenajeadas, que ingresan triunfantes a la Catedral. Ahí pasan la noche. Ahí se reúnen con Taytacha Temblores, el patrón jurado de la ciudad.

La agenda
  • El miércoles 20 de junio, 9:00 horas: desfile de danzas típicas del Cusco. Viernes 22, 11:00 horas: desfile de saludo de las provincias al Cusco Imperial. Sábado 23, 8:00 horas: desfile cívico en homenaje al Cusco Eterno. Las actividades se realizarán en la plaza Mayor.
  • Si bien hay tribunas para el acto final del Inti Raymi, el acceso a las actividades del 24 de junio es gratuito. La jornada empieza en el Qoricancha (9:00 horas), sigue en la plaza Mayor (10:30) y culmina en Saqsaywaman (13:45).
Parafernalia

Acercarse, conversar con los devotos, descubrir que antes de la llegada de los españoles los hijos del sol le rendían culto a sus mallquis (las momias de sus antepasados). “Los sacaban a pasear, como ahora sacan a los santitos y las mamachas”, se escucha en la plaza San Francisco, donde creyentes y descreídos se congregan para comer el contundente chiriuchu (ají frío), un potaje emblemático del Corpus Christi. Plato de bandera. Potaje contundente y opíparo, con gallina, con cuy, con cecina, chorizo, queso, con huacatay, cancha y rocoto, con cochayuyo y un largo etcétera.

No. En esa noche limeña el inca no regaló ni una sonrisa porque estaba en personaje. Ni siquiera lo hizo cuando el ministro recordó que el Inti Raymi volvió a ser escenificado en 1944. Quizá lo haga durante la ofrenda a la Pachamama del domingo 27.

Plaza Mayor. 8:00 de la mañana. Agradecimiento a la Madre Tierra. ¿Sonreirá el inca o solo se sentirá feliz cuando haya logrado ‘amarrar al sol’ que se distancia, se aleja de la cordillera en el solsticio del 21 de junio. Si lo hace –explica el ministro–, el Inti “invicto volverá para dar luz, energía y fertilidad”. Asegurar la vida, preservar la existencia. Esa es la esencia del raymi andino.

Triple expectativa
Las autoridades del Cusco esperan que 3,750 turistas ocupen las tribunas que se arman en Saqsaywaman. El año pasado asistieron 3,000 personas, el 94% fueron extranjeros. Otra celebración. El martes 29 de mayo es el día central del Señor de Qoyllur R’iti (Estrella de la Nieve), acaso la mayor peregrinación religiosa de la cultura andina. Se realiza en el nevado Ausangate, uno de los apus del Cusco. La compra de entradas para el Inti Raymi puede hacerla en www.emufec.com/intiraymi2018/ El programa incluirá la transmisión del Perú-Dinamarca, que marcará el debut de la selección en Rusia, el sábado 16 de junio a las 10:00 horas en la plaza Mayor.

Una fiesta con tres momentos estelares. El saludo al padre radiante en el Qoricancha. El traslado en litera para el encuentro de los tiempos y la lectura de la coca en Hawkaypata (así era llamada la plaza Mayor). La ceremonia central en la explanada de Chukipanpa en Saqsaywaman. Allí están los turistas y los lugareños. Allí se reviven la historia y la cultura andina.

Y, claro, allí está el inca, actuando en esa tarde nublada, sombría, que no encaja con el ánimo de la celebración. No hay brillo ni resplandores. El cielo llora lágrimas menuditas... pero, de pronto, el Tayta Inti asoma con timidez y llega acompañado por el arco iris. Su hijo abre los brazos, le habla en quechua, lo recibe con cariño. Será un buen año, aseguran los cusqueños. Lo que no recuerdas ahora es si el gobernante del Tawantinsuyu sonrió en ese instante. Tendrás que volver para quitarte la duda.