El Peruano
Segunda Etapa. Año 5. Edición Nº 282 Miércoles 19 de setiembre de 2018
INFORME
ESTADOS UNIDOS Y CHINA MUESTRAN SU MEJOR ARMAMENTO COMERCIAL

UNA REAL FURIA DE TITANES

Con la guerra comercial entre Estados Unidos y la República Popular China en marcha, el mundo entero contiene el aliento ante los efectos en los mercados globales, una coyuntura a la que el Perú no es ajeno. Escribe: Rodolfo Ardiles Villamonte
Estados Unidos dio el primer golpe. Ante la vorágine de su rival asiático, decidió incrementar los aranceles a algunos productos chinos por un monto inicial, en primer lugar, de 34,000 millones de dólares y luego por otros 16,000 millones. Esto generó que alrededor de 50,000 millones de dólares en importaciones procedentes de China destinadas al mercado estadounidense están sujetas a estos aranceles.
Preparados para la tormenta
En el caso del Perú, Aquino consideró que, de llegarse a una situación de escalada en la que se sigan fijando aranceles a las exportaciones chinas en Estados Unidos, los más afectados serían economías como Japón y Corea que venden componentes a China, afectando también a naciones como el Perú que exporta materias primas. Sin embargo, el experto comentó que nuestro país podría beneficiarse si China deja de comprar ciertos productos a Estados Unidos, como los espárragos. “Pero debemos trabajar en la diversificación de nuestra cartera exportadora para ofrecer en buenas condiciones lo que esas economías requerirán cuando dejen de importar de los mercados en disputa”.

Para el profesor de Economía Asiática de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), Carlos Aquino, no todo quedó allí. China respondió de la misma forma, poniendo aranceles a los productos estadounidenses por un valor de 50,000 millones de dólares, con una clara perspectiva de que esta situación va a continuar. La “guerra comercial” fue declarada.

Según Aquino, las “batallas” se seguirán librando en el campo de los aranceles, pues el mandatario estadounidense, Donald Trump, “amenazó” con fijar nuevos gravámenes por otros 200,000 millones de dólares.

“Si las cosas no se solucionan, esto entrará en funcionamiento en dos o tres semanas. Es de esperar que China también tome medidas muy similares”, aseveró.

Dilema chino

No obstante, uno de los problemas que tiene China es que no compra tantos productos de Estados Unidos, por lo que no podría imponer aranceles por 200,000 millones de dólares. No obstante, es posible dar una mirada más profunda.

Datos
  • Actualmente, la economía estadounidense está creciendo más que en los últimos 20 años. Por ejemplo, Japón solo crece 1% y la zona euro en 1.1%, mientras el país norteamericano lo hace en 2.9%. Por ello, Trump se siente con fuerza para aguantar una guerra comercial.
  • En teoría, en esta guerra comercial China sufrirá más porque le vende más a Estados Unidos. Sin embargo, hay más inversión estadounidense en China y, si la guerra escala, el gigante asiático también limitará la presencia de estas empresas en su territorio.

“Cuando Trump asumió la presidencia, sostuvo que China es un socio comercial que vende mucho a Estados Unidos, pero que le compra poco. Y los cuestionamientos no se centran solo en temas comerciales, pues parte de las críticas refieren que los productos chinos entran a Estados Unidos con subsidios del gobierno asiático; y peor aún, sostienen que China consiguió ser una potencia exportadora e industrial porque obligó a las empresas que van a su territorio a asociarse con firmas chinas y transferir tecnología, se trata, pues, de una condición impuesta por dicho país”, precisó Aquino.

Agregó que Estados Unidos necesita ponerle fin a estas cosas, de manera que inició una guerra comercial para obligar a China a que abra su mercado.

“Cree que debe hacerlo, pues según algunos analistas, aunque Estados Unidos continúa siendo la primera potencia, si no actúa rápido para frenar a China, en solo tres o cuatro años ya no podrá hacerlo”, refirió.

Causa y efecto

De acuerdo con el catedrático, la guerra comercial es una manifestación de algo más grande. Sin embargo, si se aplican los aranceles anunciados, los productos costarán más para los consumidores estadounidenses, en promedio unos 150 dólares más.

LA TERCERA PARTE DE LOS BONOS DEL TESORO DE ESTADOS UNIDOS LOS TIENE CHINA.

“Trump, por su parte, les dice a los productores que venden en el mercado de Estados Unidos que, si no desean un escenario así, entonces deben llevar toda su producción a su país. Y claro, eso es difícil más aún ahora que la producción de las mercancías se hace en muchos países.”

Además, asegura Aquino, parece que el presidente Trump desconoce cómo funciona el sistema comercial internacional.

“No por fijar aranceles a los productos que se fabrican en China obligará a los productores de esas mercancías a mudarse a los Estados Unidos. Precisamente, la crisis de 2008 desnudó ese tema, ya que muchos decían que la mano de obra en Estados Unidos es cara y debían buscar otros lugares, acelerando un proceso que lleva más de dos décadas”, puntalizó.