El Peruano
Año 5. Edición Nº 288. Jueves 21 de febrero de 2019
AVENTURA
VIAJE INOLVIDABLE

Sabores del Callejón de Huaylas

Saborear los más exquisitos helados naturales de Carhuaz, dulces a base del manjarblanco de Caraz, una raspadilla en Yungay con el hielo del nevado Huandoy o navegar en las aguas de Llanganuco, solo es posible si se aventura a recorrer el Callejón de Huaylas. Texto y fotos: Hugo Grández
Karina y Raúl acaban de casarse. Es el día más feliz de sus vidas y quieren estamparlo en fotos y videos. El lugar tiene que ser el mejor, así que han escogido el más bello paraje natural de su natal Huaraz. Una lancha los espera. Suben, se acomodan, y empiezan a destellar los flashes en la misma laguna de Llanganuco, una joya de color turquesa que se muestra a los pies del nevado Huascarán.

Ubicada dentro del Parque Nacional Huascarán, a 3,850 m.s.n.m, la laguna de Llanganuco recibe a diario a centenares de visitantes nacionales y extranjeros, quienes no solo la contemplan, sino que pasean sobre sus aguas gracias a las lanchas que hacen el servicio por solo cinco soles y se retratan en sus orillas y pequeños muelles.

Se ubica a 84 km de Huaraz y sus aguas nacen de los nevados Huascarán, Huandoy, Pisco y Yanapaccha. Al visitarla, lo sorprenderá el bosque de Queñual, árboles y arbustos de tronco retorcido de color naranja intenso. Están por todos lados y siempre invitan a tomarse una foto del recuerdo.

A diferencia de otros parajes naturales, llegar a las orillas de Llanganuco no supone mayor caminata, pues las movilidades lo dejarán a pocos minutos de esta maravilla. El costo de ingreso es de 5 soles y, muy importante: no deje nada suyo; todo lo que descarte regréselo con usted, porque está en un área protegida.

Helados y raspadillas

Lo ideal para llegar a Llanganuco es tomar un tour. Si lo hace, entonces visitará las ciudades más turísticas del Callejón de Huaylas, ese extenso corredor flanqueado por la Cordillera Blanca y la Cordillera Negra, en el corazón del departamento de Huaraz.

El primer lugar para visitar será Carhuaz y la primera atracción la encontrará en la Plaza de Armas. Son los helados naturales de sabores curiosos. Están el de rocoto, coca, cerveza, palta, pisco sour, cushuro, kiwicha, maní, borgoña, tuna, entre otros. Los encuentra en la heladería Porvenir y su costo mínimo es de cinco soles.

Una hora después llegará a Yungay. Allí encontrará el registro real de una comunidad que se reconstruyó después del aluvión que sepultó prácticamente todo el pueblo en 1970. Un guía o los lugareños podrán contarle la historia del estadio de Yungay y el circo que realizó una función allí en la misma tarde de la tragedia. El aluvión no cayó sobre ese estadio, por lo que los niños que fueron al circo se salvaron.

La Laguna de Llanganuco recibe a diario a centenares de visitantes quienes se sorprenden con su belleza.

Una curiosidad de la visita es que allí se encontrará con vendedores de raspadilla, quienes aseguran que este refrescante dulce es elaborado a base del mismo hielo que baja desde el nevado Huandoy. Así que tiene que darse el trabajo de corroborarlo. El precio es de dos nuevos soles.

Dulces y arte

La ruta continuará con una visita a Caraz. Una de sus especialidades son los dulces, por lo que encontrará una variedad de manjarblancos. La sensación siempre son los alfajores, pero también puede llevarse unos potes de manjarblanco, leche, yogur o queso.

Tome nota
  • Para Llanganuco, lleve abrigo. Corre viento y hace frío. Le sugerimos tomar mate de coca para el soroche.
  • No olvide visitar la Catedral de Huaraz, declarada Patrimonio Cultural de la Nación.
  • Visite el Museo Arqueológico de Huaraz. Cuesta cinco soles y verá restos de las culturas de la región y la réplica del Lanzón de Chavín.

Y la ruta por el Callejón de Huaylas no puede terminar sin visitar a los artesanos del distrito de Taricá. Se encuentran a media hora de Huaraz y en sus talleres encontrarán variedad de cerámicas hechas por hombres y mujeres a base de arcilla. Puede llevar para recuerdos. Los más pedidos son el Lanzón de Chavín y las cabezas clavas, en versiones llaveros o también los grandes que llegan a medir más de dos metros.

Ya tiene un destino más. Deje la rutina y anímese a vivir nuevas emociones en la impresionante laguna de Llanganuco y los atractivos que el Callejón de Huaylas le ofrece.